Los recolectores, luego de recibir sus certificados, junto a representantes de Amigarse y Swiss Contact.

• Dos asociaciones ahora cuentan con su propia balanza y un triciclo eléctrico que funcionará como un fondo rotatorio.

Confianza, optimismo y la certeza de que tener un emprendimiento propio es posible, fue el sentimiento compartido de 17 recolectores al concluir un proceso de capacitación en liderazgo y emprendedurismo, que les servirá para impulsar y fortalecer el trabajo en sus asociaciones y vislumbrar un modelo de negocio para su actividad o para migrar a otra.

Comunicación asertiva, compromiso y responsabilidad, herramientas financieras y el modelo Canvas para diseñar un modelo de negocio, fueron parte del aprendizaje, donde también descubrieron sus fortalezas, los puntos de mejora y la importancia de trabajar en equipo para avanzar en sus emprendimientos.

Esta actividad fue realizada por la Fundación Amigarse, con el apoyo de Swiss Contact, y junto con recibir sus certificados, dos asociaciones recibió una balanza en calidad de donación y un triciclo eléctrico, el cual permitirá la creación de un fondo rotatorio. El socio que lo use, tendrá que hacer un depósito mensual para generar un fondo y en unos meses contar con otro triciclo, con el consiguiente beneficio en capacidad de recolección e ingresos.

La coordinadora de Gestión Operativa y Sensibilización del proyecto Mercados para el Reciclaje de Swisscontact, Viviana Parada, destacó el trabajo que está realizando Amigarse, a través de la Casa del Recolector, para apoyar el crecimiento de las personas que se dedican al reciclaje y expresó que continuarán trabajando para apoyar este tipo de iniciativas.

Por su parte, el director ejecutivo de Amigarse, Heiver Andrade, felicitó a los recolectores y los desafió a aplicar las herramientas y los nuevos conocimientos en el desarrollo y fortalecimiento de sus asociaciones y de su propia actividad.

Siete jornadas de compromiso

Durante siete sábados, los recolectores participaron en las charlas que incluyeron dinámicas y actividades en grupo. Yadilka del Valle fue la facilitadora y destacó que trabajaron con un grupo muy comprometido y con liderazgo en sus asociaciones, que llevan muchos años en el rubro y que han demostrado sus ganas de seguir aprendiendo. En ese sentido, los temas que podrían incorporarse a futuro son negociación y resolución de conflictos o la constitución legal de las asociaciones, entre otros.

José Yanarico, de la Asociación “15 de Abril”, calificó de muy buena la experiencia y está seguro de que le servirá para impulsar proyectos junto a sus compañeros y también a título personal, donde -junto a su familia- proyecta poner en marcha un restaurante, en el cual también se pueda incorporar la cultura del reciclaje. Victoria Poñe pertenece a la misma asociación  dijo que el proceso fue muy importante para aprender a administrar un negocio y buscar nuevas alternativas para el reciclaje.

Sonia Franco, de la Asociación “Parque Industrial 29 de Marzo” que se constituyó hace menos de 4 meses, manifestó que “he aprendido que debemos trabajar en equipo y entregar los residuos en las mejores condiciones para obtener mejores precios. Tenemos que seguir adelante, con fuerza, sin desmayar”.

Liliana Gutiérrez, presidenta de la Asociación Crecer 4, recibió una de las balanzas que permitirá mejorar la recepción y entrega de los productos. “Esta capacitación nos ha ayudado mucho para organizarnos como microempresa, hemos aprendido cosas nuevas y que podemos aplicar para ayudar a nuestros compañeros. Ahora sabemos cómo organizarnos, entregar a las empresas mejor calidad de material, hacer una buena clasificación y sacar mejor las cuentas”.

Todos se fueron satisfechos, esperanzados y con la decisión de continuar trabajando para mejorar su organización e identificar nuevas oportunidades para cada uno de los integrantes de sus asociaciones. Como dijo Raúl Paucara, otro de los capacitados, “el objetivo ahora es ser empresarios”.